Una vez conozcas la forma de cómo hacer tu anuncio más atractivo, conseguirás que no sea uno más en el mercado. Tu casa se habrá convertido en ese coche nuevo, limpio, del que hablábamos al principio.
Los futuros potenciales compradores repararán en tu lugar y querrán verlo rápidamente. Cuando te ofrecen un caramelo y sabes que tienes poco tiempo para comértelo, decides hacerlo en cuanto antes.
Por otro lado, conseguirás una venta que te aporte más calidez. Una venta que podría haber sido muy fría, se transforma en una sensación muy agradable, ya que le ofreces al vendedor, el quedarse con un buen sabor de boca, después de haber optado por esa gran golosina.
Ese sabor que te va a permitir seguir tu camino. Y esa venta te quita un peso de encima, te da tranquilidad y te permite avanzar.
¿Y qué me dices de tu alquiler? Está demostrado que el ofrecer más cuidado y calidad, te hace recibir de igual manera. Y cuando no puedes o no quieres vender, pero si alquilar, lo que deseas es que te cuiden con mucho cariño tu sitio. De la misma forma que lo has cuidado tú antes de entregarlo. Por eso, cuida tu lugar y te estarás cuidando tú… y a los demás.